6/1/13

os lo dije

Os dije
que si me empezaba a convertir
en el hombre que soy ahora
me avisarais.
Os dije
que si llegaba a ser uno de esos tíos de cuarenta y cinco años
(fans de Springsteen)
que salen los fines de semana
con vaqueros,
zapatos
y americana,
consiguieseis que entrara en razón.
Os dije
que si era el calvo barrigudo
que va a conciertos de jazz,
se emborracha
y baila
(con un encanto que cree tener y que nunca tuvo)
me encerraseis.
Os dije
que si intentaba acariciar los brazos de las veinteañeras
en el metro
y me iba de putas
(total para qué)
con más frecuencia de la que pisaba una librería,
avisarais a la policía que se encarga de la gente como yo.
Os lo dije tantas veces.
Os dije que si pasaba todo esto
me matarais.
Pero no lo hicisteis.
Por eso ahora os odio
más de lo que me odio a mí mismo.
Por haberme dejado terminar así
sin tratar de impedirlo.
No voy a perdonaros
en lo que me quede de vida.
No puedo hacerlo.
 
(Escuchando: Morrissey - Suedehead)

3 comentarios:

Verónica O.M. dijo...

Es ley de vida. Para mi, qué no es para tanto jaja (perdón por reír)
Un abrazo

Acuática dijo...

Hey!
¡Has sido finalista en ReC! Tu cuento, no es peloteo, es el que más me ha gustado ^_^
¡Felicidades! ;)

budoson dijo...

Gracias. Para mí es mucho más importante que te guste a ti por ejemplo que al tal Sagarna.