20/12/12

pues vaya

Belén Serranos coleccionaba, bueno, a ver si consigo explicarme. ¿Sabéis cuando dos o más personas se despiden amistosamente y cada una se marcha por su lado con una sonrisa residual que suele durar unos metros? Una sonrisa residual producto de esa despedida. Una sonrisa blanda que se va desvaneciendo poco a poco. ¿Nunca os habéis cruzado con nadie en ese momento? Espero que sí, porque si no debéis de pensar que estoy loco. Bien, pues Belén Serranos coleccionaba estos instantes. Esos gestos flojos de extraños que pasaban. No llevaba ningún contador ni nada, tomaba nota mentalmente y cuando llegaba a casa los añadía al total. En un cuaderno, un archivo de texto o donde fuera que lo apuntase. Y ya está. ¿Eso es todo? Sí, creo que eso es todo. No sé, a mí me pareció curioso cuando me lo contaron.

(Escuchando: Elvis - Heartbreak Hotel)

7 comentarios:

Acuática dijo...

A mí, que soy coleccionista empedernida, me encantaría tener una colección como la de Belén. Bueno, ¿y a quién no?
Gracias Budo por participar :)

Rosa dijo...

Joooo me dejaste con las ganas de saber más...

Besos de fin del mundo desde el aire

Muti dijo...

Una vez conocí a alguien que coleccionaba las pelusas que se te quedan en el ombligo. En serio, las guardaba en un bote de cristal...

budoson dijo...

Siempre es un placer, Acuática.
Bueno, es que en realidad no hay nada más que contar, Rosa.
Muti, me flipa esto que me cuentas. Quiero saber más.

Anónimo dijo...

A mi me encanta mi colección, aunque la comparto con vosotros, que es gratis!! Y también os puedo enseñar sobre cómo coleccionarla ;)

Puck dijo...

Me gusta la historia y me encanta en este contesto del fin del mundo. Muchas historias se acaban así, con un gesto raro, una sonrisa que no lo es, un... no sé qué.
Saludillos navideños

Sara Alvarez Pérez dijo...

Me encanta la imagen de la sonrisa residual que se va desvaneciendo. Yo suelo coleccionar gente que va hablando sola. Y me colecciono a mí misma la primera.