Eso que escribí. Eso que dices que es tan bueno ─es verdad, no está mal─ es sólo literatura. O esa otra cosa, lo del pelo. Anduve fino ahí, tienes razón. A la gente le gustó. Eso del pelo también es literatura. Aquello y todo lo demás. Literatura. Quedó hermoso, empleé bastante tiempo en dar con las palabras adecuadas, en invocar imágenes bellas, juegos de palabras sugerentes que hablaban de cosas que nunca sucedieron. Literatura. Esto es malo. Intenta ser literatura pero no lo es. Es peor que una canción de Jesus and Mary Chain. Jesus and Mary Chain, te he hablado de ellos. Te he dicho que son el mejor grupo de la historia. No saben tocar, no tienen presencia, ni carisma. Con pinta de toxicómanos y muy deprimidos siempre. Son lo mejor que le ha podido pasar al planeta Tierra. Sus letras son espantosas. Absolutamente cojonudos. Tienen una canción los Jesus que se llama Good for my soul. No la soporto, me encanta, de veras. Good for my soul. Es imposible ser más ridículo con sólo cuatro palabras. Es imposible ser más brillante. Tienes que escucharla. Esa canción habla de mí. Habla de ti. Esa canción, en líneas generales, habla del bien que le haces a mi alma.
3/11/16
1/11/16
tío
Oye,
qué bien hemos venido en el autobús tú y yo, ¿eh?
Tantas horas por delante los dos,
tanta preocupación,
tanto problema,
tanta obsesión.
El viaje que podías haberme dado
y lo agradable que ha terminado siendo
tu compañía.
Todo lo que me has contado,
menudas ideas más suculentas,
vaya conexiones electrizantes.
¿Qué pasará cuando te quedes solo,
cuando se termine el dinero,
cuando te despedacen el corazón
(ya falta poco)
y te desangres por dentro?
¿Qué cuando todos los demás estén
donde querían estar
y tú sigas perdido?
(¿Son felices de verdad?
¿Son tan felices como parece desde aquí?)
Si tú y yo nos llevamos entonces
como nos hemos llevado esta tarde,
te lo aseguro, amigo mío,
todo eso de lo que hablas,
toda esa gente,
no va a importar una mierda.
Si tú y yo nos llevamos
como nos hemos llevado esta tarde,
joder,
se me ponen los pelos de punta
pensando en las cosas
de las que vamos a ser capaces
tú y yo.
Confía en mí, tío.
Tú sólo confía.
qué bien hemos venido en el autobús tú y yo, ¿eh?
Tantas horas por delante los dos,
tanta preocupación,
tanto problema,
tanta obsesión.
El viaje que podías haberme dado
y lo agradable que ha terminado siendo
tu compañía.
Todo lo que me has contado,
menudas ideas más suculentas,
vaya conexiones electrizantes.
¿Qué pasará cuando te quedes solo,
cuando se termine el dinero,
cuando te despedacen el corazón
(ya falta poco)
y te desangres por dentro?
¿Qué cuando todos los demás estén
donde querían estar
y tú sigas perdido?
(¿Son felices de verdad?
¿Son tan felices como parece desde aquí?)
Si tú y yo nos llevamos entonces
como nos hemos llevado esta tarde,
te lo aseguro, amigo mío,
todo eso de lo que hablas,
toda esa gente,
no va a importar una mierda.
Si tú y yo nos llevamos
como nos hemos llevado esta tarde,
joder,
se me ponen los pelos de punta
pensando en las cosas
de las que vamos a ser capaces
tú y yo.
Confía en mí, tío.
Tú sólo confía.
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