25/2/09

bu2on00

En el momento en que yo mismo cumplo años, este blog acaba de llegar a sus primeras cien entradas. Gracias a todos los que os habéis pasado por aquí en algún momento, aunque sea por error.

(Escuchando: The Prodigy - Take me to the hospital)

17/2/09

cómo aprendí a amar a jesús


Alguien me ha contado que cuando era pequeño empecé enseguida a sentir la admiración por la Cruz que ellos querían que tuviera. Me quedaba delante de Cristo crucificado durante largo rato y parece que muchas veces, algunas de aquellas personas susurraban: “sonríe”, cuando pasaban a mi lado. Había un hombre grande y calvo que solía poner sus dedos en las comisuras de mis labios y tiraba suavemente hacia arriba. De eso sí me acuerdo. En poco tiempo se convirtió en algo mecánico y todos me alentaban devolviéndome la sonrisa. En ocasiones, esa sonrisa se convertía directamente en risa. Me cuesta hacer memoria, pero puedo ver los cultivos, la ropa que llevábamos y sentir aquel frío tan intenso. Ahora que lo pienso, todavía me sé la mayoría de las normas y las reglas de algunos juegos. Si sigo intentándolo seguramente pueda rescatar más cosas.

El caso es que cuando cumplí los 14 decidieron sacarme de allí y supongo que fue una buena idea, pero nunca volví a ver a esa gente. Bueno, tiempo después me enteré de lo que había pasado por la televisión y entonces reconocí a algunos. Y me alegré de estar a este lado, aun sabiendo que es un sentimiento muy egoísta.

Al principio me costó, pero fui dejando todo eso atrás y entré en la universidad. Mi pasión por la cruz nunca desapareció, de todas maneras. Ahora soy el farmacéutico más risueño que conozco (aunque sea por el Elavil, el Zyban, el Prozac y el Seroxat, y eso ya es otra historia), pero no puedo acercarme a un hospital. Ni puedo cruzarme con una ambulancia sin causar una impresión equivocada. Tampoco encuentro apropiado ir a la iglesia (por no hablar de funerales) y trata de imaginar lo que pasaría si voy a un entierro. Espero que Jesús me perdone.

(Escuchando: Ornamento y delito - Isabel II corta)

9/2/09

grandes momentos de la historia del cine: the straight story



ALVIN
Can I help you, Lady?

DEER WOMAN
No you can't help me. No one can help me. I've tried driving with my lights on. I've tried sounding my horn. I scream out the window. I roll the window down and bang on the side of the door and play Public Enemy real loud... I have prayed to St. Francis of Assisi... St. Christopher too, what the hell! I have tried everything a person can do and still every week I plow into at least one deer. I have hit 13 deer in seven weeks driving down this road mister and I have to drive this road every day 40 miles back and forth to work. I have to drive to work and I have to drive home... Where do they come from...? He's dead. And I love deer.

(Escuchando: Apoptygma Berzerk - Mercy Kill)


1/2/09

david bowie - the rise and fall of ziggy stardust and the spiders from mars

Año 1972. Un alienígena de aspecto andrógino y sus igualmente peculiares Arañas de Marte (abanderadas por el segundo protagonista de todo esto, el guitarra Mick Ronson), aterrizan junto al número 23 de la londinense calle Heddon. Traen un mensaje de esperanza: al Mundo no le quedan más que cinco años antes de desaparecer, pero el propio Ziggy Stardust (que así se llama el extraterrestre) ha sido envíado para liberar a la Humanidad del fin, a base de rock y amor en todas sus vertientes. La gente pronto se fija en ellos y acude en masa a sus conciertos, hipnotizada por ese sonido al que llaman glam, el dramatismo con el que El Hombre de las Estrellas grita su profecía y una estética que cabalga entre el teatro kabuki y el estilo de Vince Taylor. La popularidad de Ziggy crece tan rápidamente como su ego. Cuando ha alcanzado la fama más absoluta, conoce el sexo con sus fans en la parte de atrás de los camerinos. Pronto vendrán las drogas. Todo es una farsa y el público empieza a darse cuenta. Nadie les cree; el grupo se desintegra. Ziggy no volverá a tocar la guitarra. Ni siquiera saldrá vivo de ésta, pero nos dejará uno de los mejores y, sobre todo, más influyentes discos de la Historia.

Esta reseña debería aparecer en el nº 2 de la revista PANYMÚSICA que sale hoy mismo a las calles barcelonesas.

(Escuchando: No Trigger - Call It a Day)